Perderse unos días (todos los que se pueda) por la Toscana es de lo más recomendable. Allí se pueden encontrar muchas de las cosas que le gustan a cualquier persona que sea más o menos normal: arte, paisajes que dejan sin respiración, más arte, una gastronomía excelente, todavía más arte... Y tiendas y mercados magníficos, cuidados, elegantes, originales, que sólo son posibles si la gente que trabaja en ellos y la que compra sus productos se toma la gastronomía en serio.
Me ha llamado mucho la atención el trato que en Toscana se da a las cosas de comer y de beber, tanto que he hecho 8243787568347 fotos y voy a subir algunas de ellas en dos post. Este primero va enterito dedicado al mercado central de Florencia, que está en la Piazza di San Lorenzo, en pleno casco histórico de esta impresionante ciudad. Tiene dos plantas pero, cuando yo fuí, todos los puestos estaban en la parte baja del edificio y no se podía subir a la planta de arriba, estaban de obras o algo parecido. Sólo fui capaz de encontrar un puesto de pescado y, la verdad, no merecía mucho la pena. El resto de la oferta de este mercado es fruta y verdura (como nosotros con el perejil, ellos regalan la albahaca... y qué albahaca), carne de buena calidad, unos quesos estupendos (fijáos en los tacos enormes de parmesano) de los que ofrecen además como podéis ver una degustación, los magníficos embutidos italianos, muchísimos tipos de setas deshidratadas (¿recordáis la entrada de la pasta corta al funghi porcini????? ahora lo entiendo todo...), tomate seco, aceites y vinagres... Espero que se aprecie en las fotos cómo absolutamente todos los puestos están muuuy cuidados en cada detalle, son preciosos, y en ellos se ofrece el producto con mimo y respeto. Es un placer pasear por ellos.
En una esquina del mercado hay una tienda en la que preparan pasta fresca con una pinta excelente.
Y en mitad del paseo entre tanta maravilla italiana fijáos con lo que me encontré...
Dentro del mercado hay además algunos sitios en los que comer a buen precio, tanto bocadillos que te hacen sobre la marcha como platos típicos italianos:
En resumen, si tenéis el buen criterio de visitar Florencia no dejéis de buscar un hueco entre iglesias y museos para ir al mercato centrale.
Qué maravilla de mercado! Tomo nota porque es una de las ciudades que tengo ganas de visitar, sobre todo porque compartimos nombre..jeje
ResponderEliminarMuchas gracias, besitos
Yo estuve en el 1996 en este sitio pero lo recordaba un poco más cutre. Además, el olor a mercado tan característico. Yo recuerdo que disfrute tanto como con la puerta del Baptisterio, jejeje
ResponderEliminarFloruca, VE a Florencia que te va a encantar, y ya me agradecerás la sugerencia. Hay muuuucho turista y el aunto de bares y restaurantes es delicado (dejaré en unos días alguna recomendación en www.11870) pero la ciudad es una pasada, prodigiosa, magnífica, increíble. Te deja sin respiración. Yo he estado dos veces y, en cuanto pueda, voy a por la tercera :)
ResponderEliminarJose, imagino que del 96 a ahora habrá mejorado algo, pero el olorcillo es a mercado-del-bueno, tú sabes... :) Y ya hablaremos del Duomo y la puerta del Baptisterio... dormí al ladito, viéndolo al despertarme!!!!! Mira en Facebook :)