jueves, 10 de noviembre de 2011

Tortilla de calabacines para Ruth y Jose

Qué trabajito cuesta que los peques tomen verdura, sobre todo si no se los ha acostumbrado desde pequeños, ¿verdad? "Esto es verde" "Esto no me gusta" (sin haberlo probado, claro) ¿A que os suena? Esta receta que hoy os subo es simple pero deliciosa y, me consta, suele dar juego con los niños, quizá porque el aspecto es muy parecido al de una tortilla de papatas, que suele gustarles, así que el rechazo inicial lo superamos, pero cuando la prueban resulta que les encanta y se la comen, y así les podemos meter de contrabando verdurita sin que se enteren demasiado. Para adornarles el asunto podemos jugar con mayonesa, o con las porquerías que suelen gustarles (ketchup, mostaza y demás), pero con la tranquilidad de que por debajo de todo eso se están tomando un plato sano, sencillo y sabroso.

Necesitamos más o menos un calabacín mediano por comensal, algo de cebolla, sal, un hilo de aceite de oliva, un golpe de pimienta negra recién molida, y un microondas en el que meteremos estos ingredientes, convenientemente troceados, durante más o menos 10 minutos (esto evidentemente varía, si hacéis tortilla para muchas personas habrá que darle más tiempo). Me gusta dividir el tiempo de cocción en el microondas en dos fases, de manera que lo pongo 5 minutos, le doy unas vueltas, y luego otros 5 minutos. Una manía como otra cualquiera :) Aquí tenéis el antes y el después:



 Como el calabacín tiene mucha agua y estamos hablando del micro, el resultado será la verdura pochada pero aún durita (al dente) y con muuuucho líquido; conviene ponerla en un colador y que escurra bien ese jugo (si es mucha cantidad apretadla sin compasión con una cuchara), para que la tortilla cuaje bien. Esta preparación tan simple funciona además de perlas como guarnición de casi cualquier plato de carne, y si dejamos volar la imaginación con las especias, mejor (un ligero toque de comino le sube mucho el sabor, un buen puñado de perejil fresco le da eso, frescura...). A mí personalmente también me gusta añadirle, desde el principio, pimiento verde troceado. Pero hoy la cosa va de niños, en concreto de dos niños muy especiales, así que dejémoslo en calabacín y cebolla sin más. Sólo queda batir un huevo por persona (más o menos) y cuajar la tortilla para obtener un segundo o una cena deliciosa que, encima, está cargada de vitaminas.



 Con esta sencilla y humilde pero resultona receta quiero colaborar en la iniciativa de Rocío y José Manuel, del blog Las Recetas de Triana; como sabéis es uno de mis preferidos, y tengo una especial debilidad por estos dos trianeros y sus recetas. Además de ofrecernos generosamente muchas delicias, Rocío y José Manuel han propuesto hace poco que sus seguidores participemos en una hermosa iniciativa para apoyar, aunque sea simbólicamente, a Ruth, Jose y su familia. No tengo palabras para expresar lo que siento al pensar en ellos, están en mi corazón. Yo no sé si Ruth y Jose serán de los niños a los que les cuesta tomar verdura, pero deseo que vuelvan pronto para averiguarlo y, si le hacen ascos a "lo verde", a ver si con esta tortilla le pierden la manía al menos a los calabacines. Y si para eso hace falta "estropearla" con kepchup, mostaza, o cualquier barbaridad, lo haremos, faltaría más. Pero que vuelvan de una vez, por favor. De corazón.   

3 comentarios:

  1. Me encanta la tortilla de calabacines! Bueno, me encantan todas las tortillas - pero los calabacines quedan especialmente buenos con los huevos.
    Un abrazo Susana!

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  2. Con esa tortilla me voy a cenar a tu casa ahora mismo...exquisita y una de nuestras preferidas...Muchas gracias por participar en este actos solidario y humano que esta siendo muy bonito a ver si el final es feliz en esa familia...
    Besos

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  3. Una deliciosa... y sentida propuesta.

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