Puerros enrollados y gratinados al horno

Últimamente no se me dejaba de cruzar la receta de puerros gratinados, la primera vez en el blog de Jose Mari y, luego, en otros muchos sitios. Parecía que me llamaba para que la hiciera, insistiendo ella todo lo que podía, mírame, hazme, ya verás qué rica estoy.... Y como cada vez estoy más por la labor de escucharme aquí estoy, con esta deliciosa receta para seguir comiendo verdura, en esta ocasión puerros (aquí Arham nos cuenta sus propiedades). He modificado un poco las recetas que he visto por ahí, pero lo esencial se mantiene y da nombre a la entrada: puerros cocidos, enrollados en un fiambre (en mi caso pechuga de pavo), napados con una bechamel enriquecida con queso, y rematados con un golpe de horno. Nada más (y nada menos).

He limpiado y troceado los puerros en porciones, más o menos del tamaño de las lonchas de fiambre que tenía, y luego los he cocido en agua con sal durante 10 minutos. Ese agua ni hablar de tirarla, yo la he usado para una crema de calabaza que me he hecho de primer plato :) Luego he puesto los puerros a escurrir sobre papel de cocina para que pierdan el exceso de agua, los he colocado en vertical (pensad en cómo son los puerros) agenciándome un molde de esos que usamos para presentar las cosas muy bonitas, que ha demostrado servir para algo más, fijáos:

He preparado una bechamel y, con parte de ella, he cubierto un poco el fondo de una fuente apta para el horno. Sobre esa base he colocado los puerros, previamente enrollados en lonchas de pechuga de pavo, aunque evidentemente podéis usar fiambre de cerdo, como en la mayor parte de las recetas que he visto por ahí.

 Luego he napado los puerros con el resto de la bechamel y los he cubierto con queso rallado (usad el que más coraje os dé, yo hoy uno de esos variados con 3-4 tipos de queso), se gratina el asunto hasta que se forme esa costrita que tanto nos gusta a todos, y ya está. Como diría mi sobrina Blanca, delicius!!!!!! (Dora mediante....).